Las muestras de agradecimiento continúan llegando. Gracias a vosotros también por estar ahí.
«Hortensia, te felicito por expresarte así. Muy lamentablemente todo eso es real y ayudas con tu testimonio a mucha gente ingenua o estafada por algún motivo. Nunca fui parte de un convento, pero sí he estado desde niño vinculado a la Iglesia y me identifico con mucho y suele haber líderes estafadores y manipuladores, y a quienes no pueden manipular tratan de anularlos y de ponerle a sus fieles adeptos en contra».
«Sólo darle las gracias de corazón por su valentía y por querer que las cosas cambien».
«Hola desde Colombia. He visto la página de la asociación, he leído cada testimonio y los interesantes y hermosos artículos del blog. Yo también soy una mujer secularizada, fui parte de una comunidad religiosa durante dos años y ha sido un proceso realmente complejo esto de volver a casa de nuevo. He encontrado en ustedes, en cada historia y en cada noticia de su labor un consuelo a todo lo que me dolió y a las heridas que aún no cierran. Me da mucha alegría saber que existen y que han salvado tantas vidas, devolviendo vida y mostrando el verdadero rostro de Jesús en la tierra, que un día nos escogió porque nos amó primero. Gracias por lo que hacen, gracias por darnos un lugar en el mundo y sobre todo por denunciar, porque es así como lograremos que nadie más repita nuestra historia».
«Tú caso, como el de muchos otros, por una parte, me corrobora lo que pienso de la Iglesia y, por otra, me alegran aquellas personas que eligen seguir en su convicción de amor, fe y entrega a Dios sin importar las dificultades del camino, porque os hace admirables. Se ha ganado usted todo mi respeto como persona, mujer y creyente».
«Hace 13 años dejé el instituto religioso, donde había estado durante 33 años. Hace sólo 2 años encontré al profesional que me está ayudando a superar todos mis traumas y mis dificultades psicológicas después de dejar el convento. No he dado con vosotros hasta hace poco, investigando por internet. Ojalá os hubiese encontrado antes, pues creo que la labor que hacéis es inmejorable y me hubiese ido muy bien vuestra ayuda años atrás».
«Viví tres meses como postulante y un mes y medio como aspirante. Escuchando la entrevista a Hortensia López, he constatado que he vivido los mismos aspectos que esta escritora, aunque haya sido en muy corto tiempo. Y se nos dice que podremos modificar la forma de vida interna, pero esto es prácticamente imposible. Una pena. Pero Bendito sea Dios, que muchas de nosotras hemos podido superar el trauma que implica retroceder hacia la opción de salir de esta vida. Gracias por este espacio».
«¡Hola! Quería agradecerles el trabajo que hacen: nadie en la Iglesia parece preocuparse por ayudar a quienes dejan una congregación religiosa, y el problema es real y muy serio. Besos desde Italia».